Lo que debes saber sobre la cámara frigorífica industrial

La cámara frigorífica industrial es clave en la hostelería profesional para conservar los alimentos en buen estado. La cadena de frío adecuada facilita que pescados, vegetales, carnes y otros productos mantengan intactos su sabor, aroma, textura y color. Una garantía de calidad para todos los locales de comida, bares, hoteles y tantos rubros más.

Ventajas de la cámara frigorífica industrial para tu negocio

Las cámaras frigoríficas industriales son maquinarias con grandes beneficios para los restaurantes y todo tipo de establecimientos de alimentación. El frío adecuado es un factor clave en la cadena alimenticia, ya que mantiene la calidad de los productos y alarga su vida útil. El tiempo que conservas los productos te permite ofrecer productos fuera de temporada sin gastar de más.

Los materiales con los cuales se fabrican estas cámaras son otra razón importante para su utilización. Los elementos aislantes disminuyen el contacto con la temperatura ambiente. Este proceso, a su vez, reduce el consumo de energía para mantener el frío adecuado dentro de la cámara.  En cuanto a su instalación y mantenimiento, son de los más sencillos en el sector gastronómico.

Al ser uno de los integrantes más destacados en el equipamiento hostelero, podemos encontrar todo tipo de diseños, tamaños y complementos. De esta forma, encontramos cámaras de refrigeración o de congelación, mayor o menor capacidad. Por otro lado, suelen traer incorporados sistemas de seguridad preventivos o antiincendios.

Claves para elegir mi cámara frigorífica industrial

Siempre es aconsejable redefinir de la manera más concreta posible las necesidades y las posibilidades de cada local. El objetivo es adquirir una cámara frigorífica industrial para ganar en eficiencia y no para que genere otros gastos. Por lo tanto, algunos factores extras deben ser previamente estudiados, como por ejemplo el lugar donde se colocará.

Lugar de instalación

Como con cualquier otro mobiliario, es necesaria la información de la superficie disponible para colocar la cámara. De esta forma sabremos si es mejor un de mayor perímetro y baja o viceversa.

Asimismo, las hay del tipo fijas, en las cuales se realizan aislamientos y modificaciones para adaptar a las condiciones específicas del lugar. Por otro lado, tenemos de estructura móvil que facilitan el traslado a diferentes estancias según la necesidad del momento.

Entorno de la cámara frigorífica industrial

Otro dato para tener en cuenta es el ambiente en el cual se ubicará la misma: interior o exterior. Las condiciones climáticas y la temperatura a la que se expone una maquinaria en la intemperie, requieren de condiciones específicas para el correcto funcionamiento.

Para adquirir la correcta debe priorizar el grosor de sus paneles más eficientes:

Exterior

• Cámara de conservación con paneles más gruesos para soportar temperaturas extremas
• Cámara de congelación, paneles como mínimo de 100 mm y aislante superior

Interior

• Cámara frigorífica industrial de conservación, con un panel de 60 mm tendrá calidad asegurada
• Cámara de congelación, paneles de 100 ml optimizan el rendimiento

Suelo: ¿sí o no?

Como expertos en las cámaras de frío siempre aconsejamos adquirir con suelo porque se asegura el sellado ideal. No cabe entonces ninguna posibilidad de pérdidas de frío.

Algunos clientes demuestran su preferencia por los frigoríficos sin suelo, con el argumento de que los productos que comercializan los dañan con facilidad. Se trata por lo general de aquellos que conservan elementos de gran peso. En esos casos, es recomendable acondicionar el piso para el anclaje de la cámara.

Otros detalles que suman calidad

La capacidad es la que nos permite conocer cuánto stock podremos guardar dentro de la cámara. Para medir la misma, hay que pensar en espacios necesarios entre los productos que permitan la circulación libre del aire entre ellos.

La puerta tiene tanta importancia como cualquier otra parte de la cámara. El consejo es que se pueda abrir desde ambos lugares, interior y exterior, como prevención. Es posible elegir entre diferentes materiales y sistema de cerrado: correderas, tradicional. Lo importante es que sea hermética para evitar pérdidas de frío.

La iluminación debe ser potente y con control desde ambos lados al igual que el ingreso. Por otro lado, siempre es recomendable contar un sistema de vigilancia que alerte sobre cualquier imperfecto en la cámara. Un fallo que no se detecte podría causar grandes pérdidas económicas.

Diferentes tipos de cámaras frigoríficas industriales

Además de las características que hemos mencionado, hay que optar por el tipo de cámara frigorífica industrial más adecuada al tratamiento alimenticio que requiera. Cada uno de ellos tiene sus propias utilidades particulares.

Cámaras refrigerantes

Son las más utilizadas para la conserva de frutas, verduras y otros alimentos frescos porque mantienen su humedad. Trabajan con temperatura positiva que oscila entre los 0º y los 10º. Los valores nutricionales de los alimentos se mantienen intactos durante más tiempo.

Cámaras de congelación

Al contrario que las refrigerantes, estos equipos trabajan con temperatura negativa que va de los 0º a los -28º. La función es mantener en estado de congelación los productos que se resguardan en su interior. El revestimiento que incluyen tienden a favorecer la conservación del frío y la controlar la humedad atmosférica.

Túneles congeladores

El objetivo de estos equipos es congelar de manera individual los productos que se desplazan dentro de la cámara. El funcionamiento es mediante corrientes de frío y un sistema automático de desplazamiento. Un equipamiento ideal para los negocios que trabajan con pescados o carnes y necesitan mantener las propiedades en excelente estado de conservación.

Abatidores de temperatura

Estamos en presencia de los equipos frigoríficos de mayor presencia en restaurantes y demás negocios de hostelería. Su principal característica es la capacidad de reducir de manera acelerada la temperatura de las preparaciones. Con este procedimiento se garantiza mayor vida útil y una reducción en los riesgos de contaminación.

Claves para un buen uso de la cámara frigorífica industrial

Para gozar de todas las ventajas de estos equipos hay que actuar bajo las normas de calidad requeridas. El tiempo y la temperatura son dos factores determinantes con el éxito de conservación. Los productos deben tener un límite de permanencia en cualquiera de estos equipos. Alargar el periodo recomendable podría poner en riesgo su estado y, en ocasiones, hasta favorecer la propagación de hongos y bacterias. La higiene es otro pilar de un negocio de hostelería de primer nivel. De manera periódica hay que proceder a desinfectar y desodorizar la cámara. Existen diferentes sistemas en el mercado para tal efecto, el más conocido es quizá el uso del ozono, ya que posee una doble cualidad. Elimina los olores al mismo tiempo que ataca los posibles microorganismos que se acumulan. Otro consejo es no mezclar los tipos de alimentos dentro de la cámara frigorífica industrial. Carnes, pescados, verduras tienen necesidades de conservación diferentes que condicionan la tecnología a utilizar. Lo mismo sucede con materias primas y productos elaborados. Por último, hay que llevar un control exhaustivo del estado de los alimentos que están refrigerados o congelados. La manipulación de los mismos siempre debe ser en el interior de la cámara, solo salen para su preparación o consumo. Asimismo, la entrada y salida a la cámara se recomienda hacerla de la forma más rápida posible, para evitar mayor contacto con el ambiente exterior.

Para gozar de todas las ventajas de estos equipos hay que actuar bajo las normas de calidad requeridas. El tiempo y la temperatura son dos factores determinantes con el éxito de conservación.

Los productos deben tener un límite de permanencia en cualquiera de estos equipos. Alargar el periodo recomendable podría poner en riesgo su estado y, en ocasiones, hasta favorecer la propagación de hongos y bacterias.

La higiene es otro pilar de un negocio de hostelería de primer nivel. De manera periódica hay que proceder a desinfectar y desodorizar la cámara. Existen diferentes sistemas en el mercado para tal efecto, el más conocido es quizá el uso del ozono, ya que posee una doble cualidad. Elimina los olores al mismo tiempo que ataca los posibles microorganismos que se acumulan.

Otro consejo es no mezclar los tipos de alimentos dentro de la cámara frigorífica industrial. Carnes, pescados, verduras tienen necesidades de conservación diferentes que condicionan la tecnología a utilizar. Lo mismo sucede con materias primas y productos elaborados.

Por último, hay que llevar un control exhaustivo del estado de los alimentos que están refrigerados o congelados. La manipulación de los mismos siempre debe ser en el interior de la cámara, solo salen para su preparación o consumo. Asimismo, la entrada y salida a la cámara se recomienda hacerla de la forma más rápida posible, para evitar mayor contacto con el ambiente exterior.

Otras utilidades de las cámaras frigoríficas industriales

Además de ser las mejores compañeras para los empresarios hosteleros que realizan inversiones rentables, estas cámaras son muy útiles para otros sectores y negocios. Realmente, la cadena de frío no es solo vital en los productos alimenticios, se requiere esta tecnología desde la materia prima hasta el propio consumo pasando por todas sus etapas.

En el transporte también se ha vuelto la conservación del frío una necesidad prioritaria cuando se trasladan alimentos, medicamentos u otros elementos químicos. Del mismo modo en la producción de medicamentos se vuelven fundamentales para la protección de ciertos insumos y procesos.

¿Cómo comprar cámaras frigoríficas industriales y equipos frigoríficos?

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